Fundación Málaga, en colaboración con la Universidad de Málaga, celebra el centenario de las relaciones diplomáticas entre España y Bulgaria con esta exposición

La exposición conmemora un siglo de lazos políticos, económicos y culturales, en la que Kovatchev simboliza sentimientos universales y demuestra que el arte es uno de los lenguajes más bellos y el eslabón mágico que hermana pueblos, naciones, sueños y almas.

Un recorrido fascinante por la vida y obra de un artista singular, que en 1992 trasladó su residencia de Sofía a Málaga y que ha sabido abrazar ambas culturas y sintetizar dos almas, en una única esencia.

Desde la iconografía bizantina, cuna del arte búlgaro, a los grandes maestros como Velázquez y Picasso; el caballo andaluz, los legendarios caballos tracios, “el Camino de Santiago”, “Andalucía Espiritual” y “Don Quijote con alma búlgara”, entre otras temáticas, conforman esta extraordinaria exhibición en las técnicas de pintura al óleo, dibujo y grabado.